Luego del suceso internacional de su último libro, “El regreso del joven príncipe”, el escritor Alejandro Roemmers lanzo la novela a través de Editorial El Ateneo en junio último. Hoy, con apenas dos meses en la calle, el libro encabeza los ránkings de venta que elabora la industria del libro: según las últimas mediciones, elaboradas por el grupo ILHSA, “Vivir se escribe en presente” ocupa el puesto número 1 de ventas en todo el país, en un top 5 que incluye a María O´Donnell, Daniel Morro, Evelyn Vallejos y Eduardo Sacheri. 

En esta obra, escrita en el transcurso de 2019, lejos del momento actual, Roemmers parece haber tocado un nervio íntimo, muy acorde con el contexto de “distanciamiento social” producto de la pandemia por el Covid-19. En la novela, Roemmers ilumina la importancia de los vínculos vitales en nuestra existencia, e invita al lector a la mágica revelación de lo invisible, a descubrir el universo que habita en el hoy, a resignificar las múltiples dimensiones de la finitud y poner en primer plano todo aquello que, pese a que está frente a nosotros, no siempre logramos ver.

Con sutileza desde el título, Vivir se escribe en presente es un viaje hacia la esencia del hombre: una historia de vínculos, del amor, de la búsqueda del sentido de la vida y de nuestro lugar en el mundo.

Con una prosa inteligente y accesible, el autor indaga con profundidad en los lazos vitales. Fernando, Alexia, Ron, Michael, Vicky, entre varios otros, ponen de manifiesto el valor de los afectos y del encuentro con el otro, en una suerte de contracara de la era de la alienación, donde las exigencias urbanas y la omnipresencia de la tecnología lo invaden todo.

Se trata también de un recorrido por los bellísimos paisajes de la Patagonia argentina y de las anheladas playas caribeñas, que nos alienta a soñar y a abrazar el cuidado de la naturaleza y su diversidad, para garantizar la preservación de las especies.

A través de un relato preciso y con palabras amables, Roemmers nos invita, en definitiva, a tomar consciencia de que la esperanza de un futuro mejor anida siempre en el presente.