El informe que elabora la Fundación Libertad y Progreso en base a datos propios genera preocupación en ámbitos empresariales y políticos. Es que 50 por ciento de inflación en un año altera cualquier proyección a futuro en materia de desarrollo de negocio.

De confirmarse, no solo este último año la Argentina habrá llegado a una inflación elevada y de las más altas del mundo, sino que en los últimos 10 años habrá acumulado un incremento de 1.936,2%. Demasiado, ¿no es así?

Un elemento clave es lo que ocurre con la comida. En junio, la variación inflacionaria volvió a estar por encima del índice general. Es decir, mientras la inflación del mes fue del 3% en el rubro Alimentos y Bebidas el impacto se midió en 3,3%. Y eso es clave porque se trata de un rubro que, ponderado, cubre a toda la población, a diferencia de otros.

Agrega la Fundación LyP que "desde septiembre de 2018 que el rubro alimentos y bebidas crece por encima del IPC General, en términos interanuales. En 8 de los últimos 12 meses la evolución del nivel de precios del rubro Alimentos y Bebidas se incrementó por del índice general".

En este contexto, del 3% de inflación del mes un 0,8% se explica por los aumentos que registraron los productos alimenticios, lo que afecta de manera directa a los sectores de menores ingresos de la población.