Lo primero que hay que decir es que no hay que enojarse con la realidad, sino asumirla y ver de qué manera se mejoran las cosas, para poder dar respuestas claras y concretas a una situación que empieza a ser más seria de lo que muchos creían.

Tal como lo explicábamos hace dos días (el 9 de mayo) en nuestro artículo donde describíamos la situación epidemiológica local luego de conocido el caso positivo de la trabajadora de la Clínica del Niño, infectada de coronavirus, hay serias posibilidades de que el virus que provoca la enfermedad Covid-19 esté circulando en Mar del Plata.

El domingo se confirmó que en la misma clínica hay otros cuatro casos de trabajadores de la salud enfermos. Si bien los casos descartados son muchos más -y esa es la buena noticia dentro de la gravedad del asunto- no podemos dejar de preocuparnos por los que sí contrajeron la enfermedad.

Pero vayamos más allá: puede haber más gente contagiada si los cuatro casos nuevos, que son todos asintomáticos, tuvieron contacto frecuente con más gente sin saber que estaban diseminando el virus. Al igual que en el caso original, el contagio puede ser amplio.

Solo para dar una muestra de cuan veloz podría estar circulando el virus, podemos decir que es muy probable que un caso haya contagiado a cuatro. Pero si ese caso original no fue el factor determinante y la confirmación de la primera paciente llegó antes que los otros por su sintomatología –solamente-, hay dos cosas más para decir: que en realidad fueron cinco los casos que surgieron de uno mismo, y que los la mala noticia es que el virus anda suelto por Mar del Plata.

Sería importante que se generara una información veraz sobre los hechos. Para que todos los marplatenses tengan la posibilidad de tomar más medidas de prevención y que, ante la eventual aparición de síntomas, puedan acudir a una consulta para evacuar dudas y descartar o confirmar contagio posible.